Vistas de página en total

viernes, 18 de abril de 2014

La caja




         Me dispongo a salir de casa y cuando abro la puerta, en el suelo, al pie de la entrada encuentro una caja, una caja cuadrada, de color rojo, atada con un lazo también rojo para sujetar la tapa.
         No se que hacer, alguien la ha dejado ahí y además creo que con la intención de darme una sorpresa.
         La recojo del suelo y vuelvo a entrar en y casa me dispongo a abrirla, no sin antes notar un hormigueo. La curiosidad me puede. Algo me dice que encierra un mensaje, una historia importante.
         El interior está lleno de fotografías, antiguas, en blanco y negro. ¿ Cuantas historias y cuantas vidas puede haber en esa caja? pienso
         Las fotos empiezan a transmitirme ideas, veo a tres personas en la mayoría de ellas, parecen unos padres y un niño pequeño. Noto que están tratando de contarme algo, me siento aturdido y empiezo a intentar colocarlas en orden, de alguna manera en orden cronológico, componiendo una historia, una vida. Las coloco partiendo de las que el niño parece más pequeño y voy ordenándolas para hacer una cronología siguiendo de alguna manera el crecimiento del niño.
         El corazón me va dictando el orden de la historia. Estoy asustado y a la vez intrigado. De pronto veo que en las últimas fotos, el niño ya no está.
         Siento una angustia ¿es posible? ¿estoy notando que las fotos me están contando alguna vivencia?. Empiezo a imaginar una historia familiar, de unos padres con su hijo, pero ¿Qué quieren decirme?, ¿Por qué en las ultimas fotos no esta el niño?
         Revuelvo la caja y veo que en el fondo, casi pegadas, hay dos fotos más, con la imagen hacia abajo.
         Nunca pude imaginar que una caja llena de recuerdos, que no son míos, pudiera haberme impresionado tanto.
         Al coger las dos fotos del fondo y darles la vuelta un terrible escalofrío recorre todo mi cuerpo. En ellas aparecen otra vez esos padres con el niño, ya bastante mayor.
         Me quedo horrorizado, bloqueado, sin poder moverme. Un sudor frío empieza a resbalar por mis sienes. Ese niño, con mas edad, soy yo.
         Pero estos no eran mis padres, no los conozco de nada, no les he visto nunca o no recuerdo haberlos visto nunca.
         Mi cabeza esta a punto de estallar. ¿Tenía un hermano gemelo que se crió en otra familia,  mis padres nos repartieron con otras personas que no conocí nunca?
         Siento un horrible mareo, no puedo pensar con claridad. Alguien ha dejado la caja en la puerta de mi casa porque quería contarme algo.
         Toda mi vida se ha desmoronado ahora, no recuerdo claramente que ocurrió en mi infancia,  no recuerdo nada.
         Ahora no se quien soy.






Ismael Tomas


No hay comentarios:

Publicar un comentario